Resumen:
La familia como unidad de reproducción de la sociedad se ha transformado en los
últimos años a raíz, entre otras cosas, de la intensa migración interna y externa que es
común en Bolivia. La dimensión relacional de los integrantes de la familia en Tiraque
está atravesada por ciertas lógicas que vinculan a padres e hijos a través de una
interacción productiva en lugar de una auténtica interacción afectiva.
En este espacio los padres e hijos conversan más sobre todas las actividades que han
hecho y que les falta por hacer y no tanto sobre sus deseos, aspiraciones u opiniones. El
espacio alimentario también legitima el discurso familiar de padres a hijos. Resulta pues
clave una aproximación a la construcción de la familia desde la dimensión
comunicacional. Por eso se recurre al concepto de imaginarios, entendido como la
constelación de sentidos que una comunidad posee y que encuentra su momento de
expresión en lo simbólico.